Hace un par de años, algunos ayuntamientos como el de Barcelona empezaron a asumir responsabilidades en la gestión energética. La Ciudad Condal asumió la transición hacia la soberanía de la energía como alternativa a un modelo caracterizado por el predominio de los combustibles fósiles y su consecuente huella de carbono.
Pero no ha sido la única Administración Pública en asumir responsabilidades en la gestión energética, ya que se han sumado a la iniciativa otras ciudades como Granada y pequeños municipios. Poco a poco, lo ámbitos público, económico y social van asumiendo el gran reto de invertir en el desarrollo de las energías renovables.
En este post vamos a compartir contigo cuál es la principal responsabilidad de estas Administraciones Públicas en materia energética.
El consumo energético municipal presenta una serie de características específicas en base a la diversidad de funciones que desempeñan los centros municipales (edificios oficiales, colegios, instalaciones deportivas, bibliotecas, centros de salud) y el uso de las distintas fuentes de energía renovables (agua, sol, viento, biomasa, etc.).
En general, es conveniente que en los ayuntamientos exista un gestor energético para impulsar y coordinar las actuaciones municipales en esta materia. Las principales responsabilidades de los ayuntamientos son:
Sin embargo, los ayuntamientos deben disponer de los medios materiales y humanos necesarios para apoyar el desarrollo sostenible del municipio.
La eficiencia y el ahorro energéticos son objetivos prioritarios para cualquier economía. Y lo mejor de todo es que pueden conseguirse fácilmente sin influir en el dinamismo de su actividad, dado que mejoran la competitividad de los procesos productivos y reducen las emisiones de gases de efecto invernadero.
La contaminación lumínica tiene tres efectos: coste, contaminación medioambiental por generación eléctrica y la contaminación lumínica del cielo, que impide ver las estrellas desde los centros urbanos. Green Globe la define como “la emisión de flujo luminoso por fuentes artificiales de luz constituyentes del alumbrado nocturno, con intensidades, direcciones o rangos espectrales inadecuados para la realización de las actividades previstas en la zona alumbrada”.
Sus principales causas son un inadecuado flujo lumínico, la falta de calidad en el diseño de las instalaciones de alumbrado, la posición inadecuada de farolas y focos, mala orientación o potencia no adecuada al uso en cada franja horaria.
La Unión Europea (UE) ha marcado como objetivo el incremento de la eficiencia energética en un 20% de cara a 2020.
Las instalaciones de alumbrado público exterior pueden ser mejoradas potencialmente, así como contribuir al ahorro económico y energético. No obstante, este paso hacia adelante está siendo motivado por 3 avances:
Un alumbrado público no optimizado repercute directamente en la factura (se desaprovecha entre el 25% y el 50% de electricidad) ya que más del 50% de la factura eléctrica municipal se debe al consumo del alumbrado público y tiene por ello grandes repercusiones económicas y medioambientales, y hasta culturales por la dificultad para impedir la visión del cielo (un patrimonio que ha sido declarado como tal por la UNESCO).
Los ayuntamientos son máximos responsables de la gestión energética que se realiza en sus municipios. Las mejoras en el alumbrado público son solo un ejemplo de las mejoras en la sostenibilidad ambiental, económica y social, pero existen muchos otros ámbitos de responsabilidad aplicable a estas AAPP. Por ejemplo: el fomento de las energías renovables, como ya se ha hecho en ciudades como Granada, donde la Diputación ya planifica junto a los ayuntamientos la transición energética de los municipios de la provincia.
Ha sido la diputada de Empleo y Desarrollo Sostenible, Ana Muñoz, quien ha recibido a los representantes municipales para señalar que “esta transición no es solo una cuestión de responsabilidad respecto a este planeta y quienes lo habitan y habitarán”. “Es una gran oportunidad de crecimiento y puede ser un motor de generación de empleo e innovación de alto valor añadido para los municipios granadinos y, por tanto, para la provincia”. Así lo ha señalado Infocostatropical.
Con todo ello, en Numenti estamos convencidos de que hay que valorar positivamente la actuación de las AAPP por apostar decididamente en la intervención de la gestión energética y el cambio de paradigma.