¡Qué electricidad! ¡Vaya conexión!
¿Sabías que hace un par de años España vivió un auténtico boom con las comercializadoras de electricidad? Subían como la espuma y su mercado no paraba de crecer, atrayendo clientes y ofreciendo una mayor transparencia en la gestión como valor añadido. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia recogió un amplio listado de estas: HolaLuz, Pepeenery, etc. Algunas de ellas se habían unido al mundo empresarial por medio de las telecomunicaciones, y ahora habían visto en la comercialización una oportunidad perfecta para ampliar sus servicios.
Las cosas han cambiado y las comercializadoras han surgido para atender las necesidades de una sociedad que encontraba pocas alternativas en el mercado.
¿De qué se encargan estas comercializadoras?
Su objetivo principal no deja de ser aumentar sus beneficios, pero lo hace a cambio de ofrecer a la sociedad un servicio transparente en su gestión, la garantía de comercializar energía renovable, e incluso ahorrar en alguna factura.
Al margen de que estos objetivos se cumplan o no, las comercializadoras de electricidad se encargan principalmente de comprar energía y venderla, así como de estar en contacto con las distribuidoras para que den de alta o baja a algún usuario o gestionen cualquier otro cambio.
Podríamos decir, por tanto, que las empresas de comercialización eléctrica actúan como intermediarias con otras compañías para que suministren la electricidad.
La evolución de las comercializadoras eléctricas en España
Algunos datos publicados por La Corriente Cooperativa Madrileña demuestran que a finales del año 2014, “los tres mayores grupos comercializadores del país aglutinaban el 67% del volumen de energía suministrado en mercado libre”. En ese momento había un total de 200 empresas comercializadoras, pero varios años después, el número de empresas eléctricas se ha ido extendiendo a más de 750, según datos de la CNMC. Teniendo en cuenta el carácter geográfico, encontramos algunas como la Comercializadora Eléctrica de Cádiz, Electra norte Energía, y la Eléctrica Sollerense.
Mientras las distribuidoras siguen siendo las compañías ‘de toda la vida’, la que nos llevan el suministro a casa, otras empresas se encargan de comercializar la electricidad con tarifas reguladas. Nuestro contacto con una u otra dependerá del tipo de necesidad o servicio que necesitemos. Y para que sepas cómo hacerlo, a continuación te invitamos a ponerte en la piel de estos casos.
¿Nos acompañas?
¿Cuándo contactar con la distribuidora y la comercializadora?
Muchos clientes de las comercializadoras dudan sobre cuándo deben ponerse en contacto con ellas, así que vamos a ver algunos casos para eliminar todas sus dudas:
- ¿Hay una avería en la red? La responsable será la distribuidora.
- ¿Crees que tu factura es errónea? La responsable puede ser tanto la distribuidora como la comercializadora.
- ¿Quieres aumentar la potencia eléctrica? La comercializadora atenderá nuestra solicitud, pero será la distribuidora quien lleve a cabo tal acción.
- ¿Y si me han aplicado una tarifa errónea? Será cosa de la comercializadora, siempre y cuando no se trate de cuestiones de contadores, extensión, etc.
¿Alguna vez te has encontrado con este tipo de situaciones? ¿Eres una comercializadora y quieres gestionar las peticiones de tus clientes de forma sencilla?
Cuéntanoslo.
Conclusión acerca de las necesidades de las comercializadoras
Ahora que la sociedad va teniendo cada vez más clara la diferencia entre distribuidora y comercializadora, sus exigencias son cada vez mayores. Necesitan un servicio transparente, un suministro eléctrico de calidad y la atención que necesitan en todo momento.
Por eso, cada vez son más las comercializadoras que se unen a soluciones a medida para garantizar la gestión eficaz de todos y cada uno de sus clientes. Así que, si tú también estás buscando la agilidad en tu gestión eléctrica, la comunicación eficiente con las distribuidoras y la transparencia, te invitamos a leer nuestro próximo artículo.
Nosotros acabamos de meterlo en el horno.
